Balance 2015: Fe, Amistad y Salud

Y así, como el niño que se duerme en brazos de su padre, se va apagando el año, consume sus últimas horas, dejando para su aliento final, el balance de lo vivido, y también porque no, de lo soñado y quizás tengamos un hueco, para echar de menos lo que pudo ser, y finalmente no fue.

 Tu, que hoy apuras las horas preparando la mesa para cenar con los tuyos, o quizás tu, que esperas en una cama de hospital ese alta que te abra ventanas a la esperanza, o tal vez tu,  que tumbada en el sofá, deseas que pase la noche, para amanecer mañana, a un año nuevo, año en el que se ponga fin a la pesadilla de lo vivido, para empezar a escribir en el diario de los sueños, las páginas de esa vida que tanto has soñado, y es que todos hemos pasado el año de forma distinta y afrontamos el que está por llegar, de manera diferente, aunque en el fondo, todos somos iguales.

Lola, Clear Channel, Pregón, Amor, Comunión, Catequesis, Padre Carlos, Amistad, Farmacia, Victoria, Paciencia, Colesterol, Carreras, Garciolo, Aneurisma, Urbanización, etc...estas son las palabras que han marcado mi año.

En mi último suspiro de año, aparecen unos ojos celestes, que le ponen nombre de epílogo soñado a un año 2015 que para mi ha sido muy gratificante. Ha nacido la niña mas bonita que jamas han visto mis ojos, mi sobrina Lola, profesionalmente he encontrado el trabajo de mi vida y sigo luchando por abrazarlo día a día, asentando en el, las raíces de los años venideros, tengo a todos los que quiero a mi lado y por suerte, todos ellos, gozan de salud, puedo presumir de tener amigos de verdad, de los que siempre están cuando mas los necesitas, aún sin tener la necesidad de hablar con ellos a diario, tengo la pena de haberme alejado de ti, por no se que mal entendido, pero estoy seguro que una conversación, bastará para unirnos, en este año también, la niña de mi ojos, mi hija Lucia, ha recibido su primera comunión y ese día, será eternamente guardado en mi alma cristiana, que desde esa fecha, todos los martes, reserva un rato de oración junto a ella, en nuestra casa de fe. Mi hijo Gonzalo, me sigue enamorando dia a dia con su maravillosa forma de ser, y de él aprendo, que es muy sencillo hacer felices a las personas que nos rodean y puedo presumir, de tener a mi lado a una mujer maravillosa,


No puedo quejarme, el año 2015 me ha traido nuevos retos, nuevas dificultades, nuevas decepciones y nuevas personas a mi vida, todo esto unido, han hecho del año que se va, un año dificil de olvidar.

Ahora, cuando en apenas unas unas horas, el 2015 apague la luz, será tiempo de propositos, de planes de futuro, de nuevos proyectos o sencillamente, al igual que haré yo, será tiempo de salud, de desear salud para los mios, para los que abrazaré en unas horas y para los que sin abrazarlos fisicamente, abrazaré en mi pensamiento, y entre ellos estarás tu, que ahora me lees, gracias por hacerlo y por ser parte fundamental en mi vida. El año 2016 empezará con el llanto de mi sobrino Pablo, que ganas tengo de verte la cara y poder abrazarte y especialmente de ver la cara de mi comunity manager preferido, cuando al fin vengas, para desordenas su ordenada vida.

Feliz año nuevo a todos, mucha salud, mucha Paciencia y gracias por existir.

La Virgen que se fué

Sin hacer ruido, dejando tras tu ausencia la duda de saber como volverías tras tu marcha. En silencio y casi a oscuras, así ha permanecido tu capilla durante los meses de tu necesario viaje.
A la izquierda te ha esperado El, quien siempre espera, incluso a aquellos, que presumen de no volver. Han sido meses de miedos, de dudas, de no saber como lo estarías pasando, sin saberte mirada por tu hijos. Meses de nervios, pensando que esas manos que te tocaban, quizás no fueses conscientes de la enorme responsabilidad que caía sobre ellas..

Sonaron las campanas. Pasada la media noche, dormía la ciudad, la vida daba paso al sueño y sin embargo, en aquella céntrica Parroquia, la vida despertaba a la vida. Volvías a tu casa, al sitio donde las Penas, llevan tu nombre, al mismo donde te fuiste sin hacer ruido y sin embargo hoy, replicaban las campanas.

En estos meses, no he querido preguntar, he querido esperarte con la ilusión de un niño, que espera la llegada de su madre, tras días de ausencia. Esperaba encontrarte cambiada, diferente, pero esperaba encontrarte, y lo hice caída la tarde, que es cuando las luces del día se esconden en las primeras sombras de la luna. Eras tu, la misma que te fuiste, la misma que sujetó a mis hijos el día que los bautizamos, la misma a la que mi madre le reza y la misma que nos espera a la derecha de una vieja capilla donde la madera se hace carne, y la carne se hace vida. Eras tu, igual pero mas bella, distinta pero mas cercana. Ahora tus ojos no dejan dudas del dolor que sientes cuando miras a tu hijo atado a la columna, ahora el color de tu cara, denota la ausencia de vida y tus manos, son manos cercanas que me invitan a pensar que en ellas descansa la esperanza de que algo mejor, siempre está por venir, tu barbilla se ha hecho mas fina para hacerte parecer presumida en tu dolor.

Eras tu madre, la misma que se fue, la que ha vuelto para regalarnos nuevas ilusiones y para llenar esa capilla que alberga tantas y tantas oraciones. En breve, los alfileres, las blondas, el tul y la mantilla se apoderarán de tu nueva piel y darán, aun mas si cabe, mas belleza a tu estrenada presencia. Te vestirán de Reina y serás como siempre, la madre de Dios, que en nuestra casa se llama Paciencia, la misma que hemos necesitado para esperarte, para soñarte y para saber vivir sin tu presencia. Gracias a las manos que te han devuelto mas bella, mas real y mas cercana, pero siendo tu, la misma que aquel dia de Junio, se fue sin hacer ruido...

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